lunes, 26 de febrero de 2007

y mañana seremos hombres...

El cuerpo humano

EL CUERPO HUMANO

I )
Una laguna en el desierto
es el sitio de los deseos
de ese ángel caído
que reposa entre mis dedos.
La calma vertiginosa
que recorre el silencio de los espejos.
Brumas de marzo
como cristales clavados en mis ojos
nubes como bálsamo de la ausencia.
Y un camino que ya no se recuerda
que siempre recorro por primera vez
con paso blindado
como una flor de láudano
consumiendo mi cabeza
entre risas y dolor.
Para ir a buscarte
cantando con voz desierta
melodía de adiós sin regreso
armonía que no da reposo
caminare inundado de impaciencia
trenzando el encordado nervioso
de una guitarra olvidada.
Así te siento cuando estas lejana
brisa en el viento de la mañana
acimut del pensamiento
que rechaza la risa de las buenas conciencias.
Así te veo en la distancia
ojos de obsidiana
perforando el acero de mi ansiedad
de éste mi cuerpo humano agonizado.

II )
Las hojas de un libro
brotaron como algas en el desierto
una piedra de cuarzo
que guardo entre mis ropas
de caminante cansado.
No busco revelaciones
y no albergo esperanza
en redenciones vanas
solo tengo en mi memoria
el aguijón del desprecio
solo vuelvo al lugar que conocimos
como viento de un diluvio
que arrasó un corazón.

III )
Las células de mi cuerpo
me abandonan
no tengo miedo
soy como un escarabajo
que anida en la corteza de tus pensamientos.
Soy un espejo reflejando la noche
ya no queda luz en mi
soy solo un brote esquizoide
que ahora atrapa
que ahora rechaza
el alimento que las palabras ofrecen.
Olvido las razones lejanas de tus manos
y por que olvido recuerdo
tus ojos en una tarde
que borrando el paisaje dijeron: te amé.

Soy todo oídos en un espacio silente
no escucho nada
no siento tu voz.

IV )
Estos brazos ya no me alcanzan
debería cortarlos
diseminarlos
entre las calles y los autos
delimitando el espacio que no me pertenece
todo tu espacio.
Insensiblemente desbrazado
no podré ceñir mas que tu recuerdo
así podré volver
así empezaré a pensar
algún modo que apacigüe
el ansiado dolor.
Ya sin brazos
ni manos ni pluma de escribir
sin deseos de abrazar nada
ni besos para tu boca
sin ganas de matar
regresaré al páramo donde el aire es denso;
regresaré a mi hogar
donde el efecto cauterizante
de tu imagen fotografiada
alimente el sueño.
de soñarte.

V )
Lanzare mi voz
por que esta boca grita
que el dolor se vaya de aquí
que la pasión encuentre piernas
manos ojos sexo y boca
con que gritar.
Tengo mi fuerza y mi cuerpo
abrazados por el fuego impiadoso
que obliga
que impulsa y encarcela.
Tengo una cabeza que no para
con una oruga eléctrica
en mi cerebro loco.
Tengo un cuerpo entre mis manos
que camina por la luz de tus ojos
que quiere penetrar en tu cuerpo
y que el fluido de tu sangre
ponga reflujo a la marea
que se agita tormentosa
a través
del manojo de tendones
carne savia pelos y uñas
que forman mi cuerpo desarraigado.

Cesaer







.